Miércoles 15 de junio 2011
Glándula tiroides o escudo: es una órgano situado en la región anterior del cuello, por debajo de la manzana de Adán junto al cartílago tiroides y sobre la tráquea. Pesa aproximadamente 15 y 30 gramos, está formada por dos lóbulos en forma de mariposa a ambos lados de la tráquea, ambos lóbulos unidos por el istmo. La glándula tiroides regula el metabolismo del cuerpo, es productora de las hormonas tiroxina T4 y triyodotironina T3.
Realizamos:
Inspección: es conveniente auscultar la arteria carótida buscando soplos, si este se ubica inmediatamente por arriba de la clavícula, puede corresponder a un soplo irradiado desde el corazón. Pero si se ubica en la parte más alta del cuello donde comúnmente esta la bifurcación de la carótida puede deberse a una estreche por placa ateromatosa que generan flujo turbulento.
Si se ubican en la parte más alta del cuello, donde la arteria carótida común se bifurca, pueden deberse a una estrechez por placas ateromatosas que generan flujos turbulentos.
También es importante la observar el pulso venoso porque que a través de esta vena podemos señalar cierta patología, como puede ser una insuficiencia cardíaca que compromete al ventrículo derecho en la cuales las venas están ingurgitadas e incluso se palpan tensas.
Palpación: El medico se coloca detrás del paciente y con sus dos manos, especialmente los dedos índices y medio, palpa la glándula: desliza sus dedos sobre la superficie, capta el tamaño y la consistencia, y busca si existen nódulos.
Técnicas.
Bocio: es el crecimiento de la glándula tiroides.
Nódulo tiroideo: es una neoplasia (protuberancia) en la glándula tiroides, la cual está localizada en la base del cuello.
No siempre se encuentran las causas de los nódulos tiroides, pero pueden abarcar: enfermedad de Hashimoto y deficiencia de yodo.
Hipertiroidismo: es una afección en la cual la glándula tiroides produce demasiada hormona tiroidea.
Este problema puede ser ocasionado por muchas enfermedades y afecciones como:
Recibir demasiado yodo.
Tiroiditis debido a infecciones virales u otras causas.
Tumores no cancerosos de la glándula tiroidea o de la hipófisis.
Manifestaciones clínicas: fatiga, aumenta el apetito, sudoración, pérdida de peso, nerviosismo, entre otras.
Hipotiroidismo: es una afección en la cual la glándula tiroides no logra producir suficiente hormona tiroidea.
Causas: enfermedades autoinmunes, defectos congénitos, extirpación quirúrgica del tiroides, radiaciones al cerebro y algunos fármacos como Amiodarona y metimazol.
Tiroiditis: es la inflamación de la glándula tiroides.
Se clasifica de acuerdo a la gravedad de la inflamación:
Supurativa aguda: inicio súbito, forma abscesos, dolor intenso, disfagia, fiebre y escalofríos.
Subaguda: inicio súbito, irradiación, edema y dolor del tiroides.
De Riedel: inicio insidioso, tiroides fibrosa, dura con hipertrofia, disfagia, disnea, disfonía y diferenciación de cáncer.
Hashimoto: crónica mas común, consistencia de caucho, crecimiento dolor, hipersensibilidad en la región del tiroides, disnea y disfagia.
Síndrome torácico S. P.: costilla cervical, escaleno anterior, síndrome costoclavicular.
Comprensión: plexo braquial, arteria subclavia, vena subclavia.
Manifestaciones clínicas: dependen del elemento comprimido, maniobra de Adson.
Tumoración benigna del cuello: tiroidea, graso, cebada, segundarias a infecciones, glándulas salivales, neutrogenas.
Cáncer del tiroides: es un tumor maligno de crecimiento localizado dentro de la glándula tiroides, puede iniciar como un nódulo, glándula dura y fija, produciendo disfagia, disnea y afecta el nervio laringorecurrente.
Descripción de una tumoración:
La presencia de una masa o tumor en cualquier parte del cuerpo requiere de importante atención y debe realizarse una evaluación cuidadosa.
Un tumor: es cualquier alteración de los tejidos que produzca un aumento de volumen, independientemente de que sean de carácter benigno o maligno.
Consideraciones que debemos tomar en cuenta al describir un tumor:
Fecha de aparición: cuando apareció y cuál era su edad en ese momento.
Evolución: ha notado que el tumor ha cambiado de tamaño con relación a su aparición o continúa igual, ha disminuido y si ha crecido considera que avanza rápido. La evolución puede ser progresiva, estacionaria, o regresiva en caso de que el tumor haya aumentado de tamaño.
Localización: se debe describir la localización más exacta y precisa posible de la masa tumoral en cuanto a la región anatómica correspondiente.
Forma: deberá describirse usando imágenes geométricas conocidas como esférica, ovoide. La descripción de la forma de un tumor debe incluir un comentario acerca de los límites o bordes del mismo.
Dimensiones: describimos el tamaño del tumor en cuanto a su longitud, anchura y grosol.
Superficie: se refiere a la impresión que deja al tacto la superficie de la masa examinada. Puede ser: lisa, irregular, rugosa nodular, áspera, aterciopelada.
Consistencia: si es duro o blanda.
Movilidad: describimos si esta adherido a la superficie donde se encuentra o es móvil.
Fenómenos asociados: el dolor, el enrojecimiento, los cambios de las temperaturas en el tumor, los fenómenos auscultaría y paliatorios como las crepitaciones y la pulsación son frecuentemente fenómenos asociados a un tumor y que deberán ser descrito cuidadosamente.